Atienden en Gipuzkoa a 189 niños de 0 a 3 años con algún problema motriz o intelectual

Dos niñas participan en ‘El día del árbol’ organizado por Aspace en Donostia.
NOTICIAS DE GIPUZKOA (2016-01-16)
Un total de 189 niños de entre cero y tres años con algún tipo de problema motriz o intelectual fueron tratados por el servicio de atención temprana que ofrece Aspace en Gipuzkoa. Además, según los datos de esta organización, un 10% de los niños menores de 3 años podrían beneficiarse, de una u otra manera e independientemente de sus capacidades, de este servicio en el que se ofrecen un conjunto de intervenciones destinadas a fomentar el desarrollo y la autonomía personal de los pequeños.

La diputada de Políticas Sociales, Maite Peña, compareció ayer en Donostia, acompañada por la directora general de Aspace Gipuzkoa, Esther Larrañaga, y la directora escolar de la asociación, Chus Gomara, para presentar unas jornadas sobre atención temprana que tendrán lugar el próximo jueves 21 en el centro Carlos Santamaría de la UPV/EHU.


Según destacó Peña, apoyar el servicio de atención temprana es “imprescindible”, ya que “se ha demostrado que cuanto antes se atiende a un niño, mayores beneficios tiene y más eficaces somos”. En este sentido, señaló que el decreto de atención temprana que está siendo ultimado por el Gobierno Vasco y que está “a punto de publicarse”, supondrá un “paso adelante” para los beneficiarios de este recurso.

Según explicó la diputada de Políticas Sociales, este decreto introducirá dos cambios sustanciales: primeramente, se ampliará de los 0 a los 6 años el margen de edad para participar de los servicios de atención temprana. Además, se ofrecerá una “ayuda coordinada” entre los Departamentos de Sanidad, Educación y Políticas Sociales que permitirá que las familias no tengan que “saltar de una institución a otra” en busca de los recursos que requieren.

NUEVO MODELO Por su parte, la directora general de Aspace Gipuzkoa, Esther Larrañaga, explicó que la asociación lleva años trabajando para “innovar y mejorar” en los programas de atención temprana que ofrece para “pasar del servicio que tenemos al que queremos”. Así, según desgranó Larrañaga, Aspace ha trabajado en los últimos años para acreditarse en un “modelo de calidad propio”, en el que han logrado el certificado de calidad ISO, así como el otorgado por la Confederación Española de Organizaciones en favor de las Personas con Discapacidad Intelectual o del Desarrollo, FEAPS. “Han sido tres años intentando cambiar el modelo, una tarea que no es sencilla pero que está teniendo un beneficio tangible”, valoró.

Finalmente, la directora escolar de Aspace Gipuzkoa, Chus Gomara, hizo un repaso sobre la evolución que ha tenido la atención temprana en el territorio. Así, explicó que mientras en las décadas de los 70 y de los 80 “se trabajaba desde el paradigma del déficit y poniendo al niño en el centro”, ahora se utiliza un “modelo integrador” que coloca a “la familia” en el centro del tratamiento, se trabaja en “entornos naturales” con el fin de “construir una relación más ajustada entre padres e hijos”. “Nos dimos cuenta de que el nivel de ansiedad en las familias era muy grande. Llegaba un momento en el que los padres dejaban de serlo para convertirse en expertos y poder así seguir practicando los ejercicios en casa. Y descubrimos que no siempre trabajar más era mejor para los niños. Además, trabajar desde el punto de vista del déficit generaba gran sentimiento de culpa, porque muchas veces las expectativas no respondían a la realidad”, explicó Gomara.


Por ello, desde Aspace han evolucionado hacia un modelo más “integrador” que estudia “las prioridades de cada familia y su visión de las cosas”, para que así “los padres puedan ejercer de ello, mientras que también viven su vida”.